Cómo colocar un suelo de madera exterior

Con la llegada del buen tiempo los exteriores de nuestros hogares cobran un atractivo especial, y es que comenzamos a pasar más tiempo en ellos. Esto hace que comencemos a plantearnos cambios para poder disfrutar al máximo de dicho especio. En este sentido, la madera toma un papel importante entre los materiales a elegir para nuestras terrazas, jardines o balcones. Si estás pensando en instalar en el exterior de tu hogar este tipo de producto, pero no sabes cómo colocar un suelo de madera exterior, sigue leyendo y descúbrelo.

Primer paso. Elegir el tipo de suelo de madera exterior

Lo primero que debemos hacer es decidir qué tipo de suelo de madera exterior queremos. En la actualidad, podemos encontrar en el mercado una gran variedad desde suelos de madera tratada hasta suelos de imitación. Si te gusta el tacto de la madera natural lo mejor es que elijas un suelo de madera tratada, el cual incluso se puede personalizar. Si por el contrario prefieres un suelo resistente que no necesite de un gran mantenimiento, un suelo de imitación a madera o tarima porcelánica será tu mejor opción.

Segundo paso. Preparación del terreno

Para poder instalar el suelo de madera exterior habrá que preparar el terreno para una correcta instalación. Lo recomendable es crear una solera de hormigón sobre la que descansará la madera y en la cual deberemos dejar caídas o desniveles hacia los desagües. Si colocamos el suelo de madera exterior sobre el terreno podremos tener problemas de movimientos de tierras y, en la mayoría de los casos, la instalación no será optima lo que reducirá el tiempo de vida del nuevo suelo.

Tercer paso. Colocación del suelo de madera

El siguiente paso en la instalación de un suelo de madera exterior es la colocación del material. Para ello, tendremos que instalar los rastreles, éstos serán del material que mejor pueda soportar la climatología del lugar en el que vivimos. Asimismo, dependiendo del tipo de clima que nos rodea se colocarán los rasteles a 30 cm en climas de alto contraste o a 40 cm en climas no muy variables.

Una vez se hayan colocado los rastreles con todo su proceso de instalación –atornillado al suelo, encolado, etc- se comenzará a colocar el suelo de madera exterior. En este punto debemos tener en cuenta los materiales que utilicemos para fijar las lamas a los rastreles, estos tienen que ser resistentes a la humedad y al resto de elementos climatológicos a los que estarán expuestos.

Cuarto paso. Últimos retoques

Una vez tenemos colocado el suelo de madera exterior le aplicaremos a las lamas un tratamiento con aceites de exterior y saturadores para aportarle brillo y fortalecer la resistencia del suelo de madera exterior. Con esto reducirás las veces de lijado.

Si quieres conocer mejor los suelos de madera exterior que hay y cual se adapta mejor a tu hogar, visítanos y nuestros expertos te ayudarán a elegir el mejor para ti.