¿Por qué un suelo laminado?
Desde su nacimiento a finales de los años 70 de la mano de la empresa sueca Perstorp Corporation, los suelos laminados han avanzado adaptándose al mercado. Las piezas de los suelos laminados están formadas, como su nombre indica, por múltiples capas que generalmente son derivados de madera. El acabado de la última capa, la visible, es una impresión de distintos tipos de madera, fotografías o imitación a otros materiales.
Los suelos laminados se han extendido rápidamente debido a su coste más económico que el de la madera natural. Y es que este tipo de sueles nos aporta un gran número de ventajas, tales como:
Fácil Instalación. Los suelos laminados suelen tener una instalación de sistema “clic” por lo que las piezas encajan una con otra sin necesidad de clavarla o pegarla al suelo lo que hace que sea más rápida y fácil su colocación.
Limpieza rápida y fácil. Los suelos laminados no retienen la suciedad por lo que a la hora de limpiarlos tardaremos menos que con otros materiales. Además, se pueden limpiar fácilmente con una mopa o pasando la aspiradora y posteriormente una fregona poco humedecida.
Se puede utilizar en diferentes habitaciones. Los suelos laminados se pueden instalar en todas las estancias del hogar, desde baños hasta dormitorios. Podemos encontrar laminados con diferentes resistencias y tratamientos que nos dan la oportunidad de poder instalar un mismo suelo en toda la casa.
Gran variedad de calidades y diseños. Podemos encontrar una gran variedad de diseños de suelos laminados, desde lamas con estampados geométricos hasta tipo madera. Asimismo, en el mercado hay una gran diversidad de suelos laminados con respecto a su dureza y características lo que hace que existan diferentes calidades.
Son hipoalergénicos y antibacterianos. Los suelos laminados no retienen la suciedad lo que los hace perfectos para lugares u hogares con un alto tránsito o con mascotas.
Su vida es larga. Aunque los suelos laminados no se pueden comparar a los de madera maciza utilizados en los antiguos castillos o palacios, su vida es larga debido a su resistencia; si además lo juntamos con unos buenos cuidados podemos tener un suelo que nos dure muchos años.
Elegante, ante todo. Al tener una última capa tipo madera, el suelo laminado adquiere todas las ventajas sobre elegancia, calidez y sofisticación que posee la madera; creando un hogar agradable y glamuroso del que no querrás salir.
Si quieres cambiar tu suelo por un suelo laminado ven a vernos a nuestros showrooms y descubre la gran variedad que existe.
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